Después de analizar los datos recabados por lo sensores, en semanas pasadas era evidente de que la cosecha de tomate estaba siendo sometida a condiciones extremas, habíamos encontrado días en que la temperatura había descendido a 47 grados centígrados y la humedad a 90%, después de que se habían alcanzado valores record como 57 grados centígrados de temperatura y 97 % de humedad. Es difícil imaginarse que un tipo de vida tan sensible como es el tomate resista dichas condiciones.
Al llegar a la visita de este día, realizamos las tareas clásicas de mantenimiento a la unidad de monitoreo y posteriormente decidimos recabar alguna fotografía para observar el estado de las plantas, entre lo que encontramos se encuentra:
Al llegar a la visita de este día, realizamos las tareas clásicas de mantenimiento a la unidad de monitoreo y posteriormente decidimos recabar alguna fotografía para observar el estado de las plantas, entre lo que encontramos se encuentra:
Como pudimos observar en las fotografías anteriores, es claro que la presencia del hongo detectado en semanas pasada se había extendido, además hay muestras de muerte de algunas plantas, así como de crecimiento anormal en algunas otras. Enrique nos había comentado que seguían esperando la presencia del agrónomo para determinar el curso a tomar.
Por otra parte decidimos agregar un cajón protector a la estación base, debido a que el periodo de lluvias no esta lejos y es necesario brindar algo mas de protección.
Por otra parte decidimos agregar un cajón protector a la estación base, debido a que el periodo de lluvias no esta lejos y es necesario brindar algo mas de protección.
Una vez confirmadas las malas noticias, solo nos queda verificar los datos registrados por los sensores para tratar de explicar el fenómeno ocurrido.
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